Cocinar con este calor debería ser considerado deporte de riesgo. Encender el horno es peor que subir el Tourmalet en chanclas, y freír algo a 40 grados se acerca al sadomasoquismo gastronómico. Pero tampoco quieres vivir a base de gazpacho de tetrabrik y polos de hielo del súper.
Por eso, aquí va un menú completo de verano: tres entrantes, tres principales y tres postres fáciles, originales y frescos. Todos se preparan en minutos, no te derriten en la cocina y, encima, impresionan como si fueses Ferran Adrià en cangrejeras. Con maridajes reales de vinos y cócteles para coronarlo todo.
ENTRANTES (FRESCOS Y CON ESTILO)
1. Gazpacho de sandía y menta con crujiente de jamón
El gazpacho de siempre, pero con toque de sandía para aligerar y menta para refrescar. El jamón crujiente pone el punto salado y crujiente. Es como ponerle gafas de sol al gazpacho clásico: todo parece más veraniego.
Ingredientes (4 personas):
- 600 g de sandía sin pepitas
- 400 g de tomate maduro
- ½ pepino
- ½ pimiento rojo
- 50 ml de aceite de oliva virgen extra
- 2 cucharadas de vinagre de Jerez
- Sal al gusto
- 4 lonchas de jamón serrano
Preparación:
- Tritura la sandía, tomate, pepino y pimiento con el aceite y vinagre hasta lograr una crema fina.
- Sal al gusto y enfría mínimo 1 hora.
- Hornea las lonchas de jamón a 180 °C (8 minutos) hasta que estén crujientes.
- Sirve el gazpacho frío, con menta y el jamón en virutas encima.
Maridaje: Albariño, como Pazo de Rubianes 1411, para acompañar la frescura frutal.
2. Ensalada de burrata, melocotón a la plancha y pistachos
Sabe a terraza de hotel caro, pero se prepara en 10 minutos. El melocotón caramelizado da dulzor, la burrata cremosidad y los pistachos un toque crujiente.
Ingredientes (4 personas):
- 2 burratas (250 g cada una). Si son de Búfala, la pueden comer los intolerantes a la lactosa.
- 2 melocotones
- 30 g de pistachos
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal, pimienta y hojas de albahaca
Preparación:
- Parte los melocotones por la mitad y márcalos en sartén o plancha (2 minutos por lado).
- Colócalos con la burrata en un plato, añade pistachos picados y albahaca.
- Aliña con aceite, sal y pimienta.
Maridaje: Rosado de Provence, como Whispering Angel, para darle glamour.
3. Tartar de tomate, aguacate y lima
Sin pescado, pero con presentación digna de Instagram. El toque de lima y aceite de sésamo le da un aire de ceviche vegetal.
Ingredientes (4 personas):
- 4 tomates maduros (pelados y picados)
- 2 aguacates
- Zumo de 2 limas
- 1 cucharadita de aceite de sésamo
- Cebollino fresco
- Sal y pimienta
Preparación:
- Mezcla los tomates con el aceite de sésamo, sal y pimienta.
- Machaca el aguacate con lima y cebollino.
- Monta en capas (aguacate abajo, tomate arriba) usando un aro de emplatar.
Maridaje: Verdejo fresco de Rueda, como Martinsancho.
PLATOS PRINCIPALES (QUE NO TE HACEN SUDAR)
1. Ceviche exprés de gambas y mango
Parece de beach club caribeño, pero lo haces con gambas congeladas. La lima y el mango convierten cada bocado en una ola tropical.
Ingredientes (4 personas):
- 400 g de gambas cocidas (descongeladas si son congeladas)
- 2 mangos maduros, en cubos
- 1 cebolla morada, picada fina
- Zumo de 4 limas
- 1 guindilla (opcional)
- Cilantro fresco
- Sal y pimienta
Preparación:
- Mezcla todos los ingredientes en un bol.
- Deja reposar 15 minutos en frío para que se mezclen los sabores.
- Sirve en copas o cuencos pequeños con totopos o pan crujiente.
Maridaje: Espumoso gallego Pet Nat, como Komokabras, para un toque más divertido.
2. Pasta fría con pesto de rúcula y nueces
Más ligera que la tradicional y con un toque picante. Lista para llevar a la playa o comer en terraza.
Ingredientes (4 personas):
- 400 g de pasta corta (fusilli o penne)
- 50 g de rúcula
- 30 g de nueces
- 30 g de parmesano
- 1 diente de ajo
- 60 ml de aceite de oliva
- Sal y pimienta
Preparación:
- Cuece la pasta y enfríala bajo agua fría.
- Tritura rúcula, nueces, parmesano, ajo y aceite hasta hacer un pesto.
- Mezcla con la pasta y ajusta de sal y pimienta.
Maridaje: Viura, como Viña Gravonia (López de Heredia).
3. Brochetas de pollo con yogur y limón (con salsa de pepino)
Jugosas gracias al yogur, se pueden comer frías o calientes. Perfectas para una cena ligera.
Ingredientes (4 personas):
- 500 g de pechuga de pollo, en dados
- 150 g de yogur natural
- Zumo de 1 limón
- 1 cucharadita de cúrcuma y ½ de comino
- 1 pepino, rallado
- Sal y pimienta
Preparación:
- Marina el pollo con el yogur, limón y especias 30 minutos.
- Ensarta en brochetas y cocina a la plancha (o parrilla) hasta dorar.
- Mezcla el pepino con yogur extra para la salsa.
- Maridaje: Cerveza de trigo, como La Virgen Trigo Limpio.
POSTRES (SIN HORNO, SIN MORIR EN EL INTENTO)
1. Dulce de piña y coco con toque de ron
Refrescante y con un guiño caribeño que lo hace más festivo.
Ingredientes (4 personas):
- 1 piña madura, en dados
- 3 cucharadas de coco rallado
- 1 cucharadita de ron añejo (opcional)
- Hojas de hierbabuena
Preparación:
- Mezcla la piña con el coco y el ron.
- Pásala por la sartén, dejándo que se dore por los dos lados.
- Sírvela caliente.
Maridaje: Ron agrícola, o ron miel, para los más dulces.
2. Helado exprés de plátano y frutos rojos
Sin azúcar ni heladera: se hace solo con fruta congelada.
Ingredientes (4 personas):
- 3 plátanos maduros, congelados en rodajas
- 200 g de frutos rojos congelados
Preparación:
- Tritura todo en procesador de alimentos hasta textura cremosa.
- Servir inmediatamente o congelar 30 minutos para más firmeza.
Maridaje: Vermut blanco con soda y naranja.
3. Rollitos de pepino y queso crema con frambuesa
Ligeros, bonitos y con un toque dulce que sorprende.
Ingredientes (4 personas):
- 1 pepino grande, cortado en láminas finas
- 150 g de queso crema
- 2 cucharadas de mermelada de frambuesa
- Eneldo fresco
Preparación:
- Unta las láminas de pepino con queso y un poco de mermelada.
- Enrolla y decora con eneldo.
Maridaje: Cava brut nature, como Recaredo Serral Del Vell 2018.
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¿El secreto para que este menú de verano funcione? Nada de sufrimiento, mucho color, maridajes reales y presentación que parece de restaurante caro. Con estos 9 platos, cualquier comida veraniega se convierte en planazo. Y sí, puedes comerlos en bikini o chanclas: lo importante es que el vino esté frío y la mesa tenga sombra.
