Hay dos tipos de personas: las que llegan con una botella de vino en bolsa del súper y las que, como tú (después de leer esto), aparecen con EL regalo. De esos que hacen que todos te pregunten dónde lo compraste. De los que convierten un picnic en un capítulo gourmet de Succession.
Y sí, empieza a hacer calor del que derrite neuronas. Así que aquí van los kits y regalos que necesitas para triunfar más que Rosalía en una fiesta de fin de curso.
1. Kit de ibéricos Montellano: el verdadero lujo portable
No hay regalo más elegante (ni más salvavidas) que un buen jamón. El kit de ibéricos de Montellano es la Beyoncé de los picnics: llega, deslumbra y deja a todos sin palabras.
Lo probamos en su presentación en Madrid, y fue un escándalo: jamón de bellota ibérico, lomo de bellota, chorizo y salchichón de cebo ibérico. Todo cortado y listo para servir, como si te lo hubiera preparado tu mayordomo personal.
¿Cuándo llevarlo? A ese picnic donde sabes que habrá ensaladilla con surimi.
¿Qué poner de fondo? Jamón Lovers, la playlist que empieza con “Smooth Operator” y acaba con “Bulerías”.
¿Con qué acompañarlo? Vermut rojo bien frío (como el de Bocamanga, si te gusta lo serio), una manzanilla, pero de las de Sanlucar (yo recomiendo la Sacristía AB, que nunca defrauda) o un espumoso, si eres más de Netflix y canapés.
2. Kit barbacoa de Discarlux: fuego y gloria
Esto no es carne, es arte cárnico. Discarlux tiene packs con chuletones, burgers y panceta que hacen que cualquiera se sienta chef sin tener ni idea.
Llévalo a la barbacoa y verás cómo el cuñado que se cree Arguiñano te deja espacio en la parrilla.
¿Cuándo llevarlo? Cuando sospechas que todo lo que hay es pollo marinado raro.
Serie para maridar: Breaking Bad, porque esto también es química.
Vino ideal: Tinto jugoso y elegante, como Jesús Madrazo Selección Ribera 2019, que aguanta brasas y miradas intensas.
3. Cesta picnic con todo puesto: sí, existen
Algunas webs como Coalla Gourmet o El Corte Inglés Gourmet tienen cestas de todo tipo. Algunas incluso con vajilla, servilletas, copas y un menú digno de Downton Abbey.
Las hay románticas, para grupazo o versión “me voy al retiro con mi perro y no pienso hablar con nadie”.
¿Cuándo llevarla? Cuando quieres impresionar sin mover un dedo (o casi).
Canción de entrada: “I’m Too Sexy”, versión acústica con queso brie.
Bebida ideal: Albariño espumoso de Mar de Frades, refrescante y distinto , al mismo tiempo.
4. Kit veggie con estilo: para no vivir solo de hummus
Sí, existen kits que no llevan ni carne ni aburrimiento. Quesos artesanos, patés vegetales, crackers con estilo y ensaladas gourmet. Busca en tiendas como Petramora, Casa Ortega o Gourmet Veggie Box.
¿Cuándo llevarlo? Cuando sabes que hay tres vegetarianos y cero opciones.
Canción de fondo: Vegan, de Fresco Trey , de tu playlist de domingo.
Vino recomendado: Rosado espumoso, como Nieva York, un Pet Nat de Microbio Wines, que además da tema de conversación.
Conclusión (porque lo importante es quedar bien sin sudar demasiado)
Ir bien equipado a una barbacoa, picnic o piscina no es de exagerados. Es de inteligentes. Quien lleva un kit de Montellano no solo triunfa, salva la comida y eleva la fiesta. Y quien añade un buen vino, una playlist y algo que no se derrita en cinco minutos, pasa de invitado a leyenda.
Así que la próxima vez que te digan “vente a la pisci”, tú ya sabes:
Nada de birras calientes y patatas rancias.
Tú eres de los que maridan un chapuzón con jamón de bellota.¿Te ha gustado? ¿Ya sabes qué vas a llevar a tu próximo sarao? Cuéntanoslo en @maria.con.g y comparte tu kit infalible. Prometemos no juzgar… si no traes surimi.