En los últimos años, los arqueólogos han encontrado todo tipo de sorpresas. Desde tiendas de vino antiguas, hasta bares de bocadillos de Pompeya. Y ahora, el último hallazgo es de lo más emocionante: un bar y salón de fumar de hace 400 años en Dover, Inglaterra. ¡Un descubrimiento con mucho sabor!
A principios de este año, los arqueólogos de Canterbury Archaeology Trust desenterraron algo asombroso en Dover. En una excavación, encontraron botellas rotas, jarras de cerámica y pipas de tabaco. Según el portavoz del Consejo del Distrito de Dover, tal y como comentan en Wine Expectator, estos objetos podrían pertenecer a una posada o taberna de la zona. Se cree que este lugar se llamaba Phoenix y data de los siglos XVII o XVIII. Aunque este fénix no ha resurgido, su historia sigue viva.
Aún no sabemos qué botellas encontraron, pero los fragmentos de cerámica dan pistas. Pertenecen a las jarras Bellarmine, conocidas también como Bartmann jugs. Estas jarras, con forma de hombres barbados, eran muy populares en Europa desde el siglo XVI. Se usaban para todo, desde almacenar vino hasta decantarlo.
No es la primera vez que se encuentran artefactos en este sitio. En excavaciones previas, ya hallaron fragmentos de copas de vino, ollas medievales, monedas y huesos de animales. Este lugar tiene muchas historias que contar.
Seguro que te preguntas, ¿por qué excavar aquí? La razón es un proyecto de 30 millones de dólares llamado Dover Beacon. Este transformará la zona en un centro de educación, arte y negocios. Empezó en julio de 2024 y se espera que termine en mayo de 2026.
Pero el Dover Beacon no es solo un lugar de arqueología. También tiene un toque histórico muy especial. Su edificio principal se llamará The Bench. Este nombre hace referencia a la costumbre medieval de los comerciantes. Ellos ponían sus productos sobre un banco para que el gobierno pudiera evaluar y cobrar impuestos. Entre esos impuestos estaban los del vino y la cerveza. Así que, como en las viejas tabernas, este lugar será un punto de encuentro local, pero con mucho más potencial económico.
El proyecto Dover Beacon se estima que generará más de 117 millones de dólares en beneficios económicos. Esto traerá inversión, empleo y nuevas oportunidades a la zona. ¡Un brindis por ese futuro lleno de oportunidades!
Así que, entre botellas rotas y pipas de tabaco, el hallazgo de este bar antiguo en Dover nos recuerda que la historia y el vino siempre van de la mano. Las tabernas de antaño no solo eran lugares para beber, sino también centros económicos. Hoy, el nuevo Dover Beacon promete ser igual de importante, pero con una vista hacia el futuro.
Entre tanto pasado y futuro, lo único que podemos decir es: ¡salud! Al pasado, al vino y a los nuevos proyectos que nos esperan. ¿Quién diría que la historia de una taberna de 400 años podría ser tan sabrosa como un buen vino? ¡Brindemos por eso!