Las fiestas navideñas son esos momentos mágicos del año donde las luces parpadean, el espíritu se eleva y las copas tintinean. ¡Sí, tintinean! Porque si hay algo que va de la mano con estas fiestas, aparte de los jerséis horteras, son las buenas bebidas. Como buenos amantes del cine, la música y las series, hoy vamos a sumergirnos en el mundo navideño con todo el glamour que merecen estas fiestas.
Comenzamos con un clásico
Solo en casa. Porque, seamos sinceros, nada dice “Navidad” como Kevin McCallister gritando frente al espejo. Acompaña esta escena épica con un ponche de huevo bien especiado. Es cremoso, dulce y te hará sentir que podrías sobrevivir solo en casa… aunque no garantizamos el éxito frente a Harry y Marv.
De las travesuras a la elegancia
Saltemos a Love Actually. Esa escena donde Hugh Grant baila por Downing Street es una joya para levantar el ánimo. Mientras lo ves, sirve una botella de Kripta Iconic, un cava español, con una calidad precio sin ningún pero. Nada dice “felicidad burbujeante” como esas notas chispeantes que te recuerdan que todo puede ser amor y risas, con villancicos de fondo.
Para los que se ponen nostálgicos
Mujercitas, era un clásico en mi casa. Ya sea la versión clásica o la más reciente, esta historia siempre nos hace suspirar. Mientras Beth toca el piano, puedes acompañar la escena con un chocolate caliente con un chorrito de Licor 43. Una combinación que endulza cualquier melancolía invernal.
Y claro, el gran clásico
¡Qué bello es vivir!, ese clásico de Frank Capra. Nada como George Bailey redescubriendo el significado de la vida para hacernos soltar alguna lágrima. A esta escena, sumémosle una copa de Whisky Batteiro, gallego y con estilo. Porque, si vamos a reflexionar sobre nuestras decisiones, mejor hacerlo con clase.
En el rincón musical
Tenemos a Mariah Carey y su eterno All I Want For Christmas Is You. Este himno merece ser disfrutado con algo tan irresistible como su melódico ritmo. Un Vermut Lacuesta Reserva en roble , elegante y con un toque festivo, es la elección perfecta. ¡Incluso puedes marcarte un karaoke para acompañar!
Y hablando de música que nos trae recuerdos, no podemos olvidar Last Christmas de Wham. Esta canción nos transporta directamente a los 80, con jerseys de lana y luces de colores. Para acompañarla, nada como un vino especiado caliente, reconfortante y perfecto para cantar con el corazón mientras recuerdas esas navidades pasadas.
Y no olvidemos el toque melancólico
Si prefieres algo con un aire más reflexivo, recuerda la escena final de El apartamento. Jack Lemmon y Shirley MacLaine brindando con champán Moses Nº 3 y una baraja de cartas nos enseñan que, a veces, lo simple es lo más especial. Para estas noches, un buen brandy Peinado te acompañará en tus pensamientos más profundos.
Las series también tienen su encanto
Si eres fanático de Friends, recordarás el caos del armadillo navideño de Ross. Para este momento, Fuenconcejo Roble, un vino joven, fresco y lleno de energía será tu mejor compañía. Saca unas tapas, ¡y que empiece la maratón de risas!
Por último, no podemos olvidarnos de Los fantasmas de Scrooge
Una historia que pide a gritos un Ron Botran 18, mientras reflexionas sobre el pasado, presente y futuro. Porque, al fin y al cabo, la Navidad también es un momento para valorar todo lo bueno que tenemos y lo que está por venir.
Así que, queridos lectores de mariacong.com, levantemos nuestras copas y que la Navidad os traiga amor, salud y muchos brindis tintineando al ritmo de vuestros corazones felices. Y recordad: siempre hay tiempo para una película más, una canción repetida, leer nuestros artículos y un brindis extra. ¡Salud y felices fiestas!