El calendario manda: el Día Mundial del Corazón y el Día Internacional de Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos se celebran el mismo 29 de septiembre. Doble brindis: uno por cuidarnos y otro por cuidar al planeta. Y qué mejor que hacerlo en restaurantes vegetarianos donde la verdura se pone seria, el plato late y el desperdicio no tiene cabida.
El Invernadero (Madrid) – 2 Soles Repsol
Rodrigo de la Calle ha elevado la cocina vegetal a la categoría de ópera. Su menú verde es como escuchar a Björk en directo: raro, emocionante y profundamente memorable. Aquí nada se tira: las pieles de las verduras se convierten en snacks crujientes, y los tallos encuentran nueva vida en fermentados. Alta cocina, cero desperdicio y mucho corazón.
Xavier Pellicer – Healthy Kitchen (Barcelona) – 2 Soles Repsol
El chef que hizo que las verduras brillen como estrellas en el cielo. Su propuesta es equilibrio puro: platos que respetan la biodinámica, trabajan con productores de confianza y buscan armonía entre cuerpo y mente. Comer aquí es como escuchar un álbum de Coldplay: todo encaja, todo fluye, todo es salud en estéreo.
Virens (Barcelona)
En pleno hotel Almanac, Virens es el reino de las verduras y los hongos. Un concepto que apuesta por la cocina verde y de proximidad. La carta cambia al ritmo del mercado, lo que significa menos despilfarro y más temporada. No es vegetariano 100%, pero sus platos se adaptan a la perfección. Perfecto para el Día del Corazón: ligero, sabroso y con pulsaciones contentas.
Rasoterra (Barcelona)
Rasoterra no es solo restaurante, es manifiesto. Vegetarianismo, veganismo, productos de proximidad y huerto propio. Además, forman parte del movimiento Slow Food y trabajan activamente en reducir desperdicios. Aquí el plato es militancia: cada bocado salva un poco de planeta y, de paso, tu colesterol.
Shangri-La (Mérida) – Solete Repsol
En plena capital extremeña, Shangri-La demuestra que un vegetariano puede ser también templo local. Platos caseros, ambiente cercano y un Solete Repsol que lo confirma como parada imprescindible. Un sitio donde lo verde se disfruta sin pretensiones y el corazón se relaja tanto como el paladar.
Vegania (Madrid, Carabanchel) – Solete Repsol
Vegano, de barrio y orgulloso de serlo. Vegania apuesta por una cocina 100 % vegetal con platos que conquistan incluso a los más carnívoros. Su Solete Repsol demuestra que comer sano y con estilo ya no es marginal. Aquí no sobra nada: lo que no se sirve en plato, se reinventa en otras preparaciones.
Estos restaurantes tienen algo en común: cuidan de tu salud cardiovascular y, en muchos casos, piensan también en la salud del planeta. Platos de temporada, productores locales, aprovechamiento integral de alimentos y proyectos sostenibles que van más allá de lo verde en el plato.
El Día Mundial del Corazón nos recuerda que comer sano no es postureo, es supervivencia. Y el Día Internacional contra el Desperdicio de Alimentos insiste en que el planeta no soporta más despilfarro.
Así que la próxima vez que entres en un vegetariano, recuerda: no solo estás mimando tu corazón, también estás escribiendo un pequeño manifiesto contra el desperdicio. Y todo con una copa de vino blanco fresco —que, aunque no sea verde, también cuida el alma.