Los Golden Globes no solo se definen por los premiados, sino también por sus momentos extravagantes. Este año, Moët & Chandon, el champán oficial del evento, continuó su tradición de Toast for a Cause.
Ganadoras, como Zoe Saldaña y Jodie Foster, brindaron con Moët Minis en apoyo a más de 25 organizaciones benéficas. Hiroyuki Sanada y Anna Sawai, también lo hicieron. Pero lo más curioso fue su innovador vending machine, que entregaba champán en la alfombra roja al simple toque de un botón. ¡Hollywood se deshizo de la espera por una copa!
El champán, no fue el único protagonista. Saratoga® Spring Water se encargó de mantener a todos hidratados con su agua fresca y refrescante. La sirvieron desde la cena hasta la fiesta posterior. El agua se convirtió en el acompañante perfecto para los platos del chef Nobu Matsuhisa, ofreciendo una velada tan glamurosa como saludable.
La velada estuvo marcada por nombres como Emilia Pérez, que se llevó el premio a mejor película de comedia, mejor película extranjera y mejor actriz de reparto, que fué para Zoe Saldaña. Fernanda Torres brilló al conseguir el premio a Mejor Actriz de Película por I’m Still Here. También Colin Farrell se llevó el premio al Mejor actor en miniserie por The Penguin. Demi Moore, premiada como Mejor actriz en una película musical o comedia, por The Substance, dio un discurso sobre la persistencia y la confianza en uno mismo.
Las estrellas también disfrutaron de un menú exquisito, de Nobu Matsuhisa, maridado con Moët & Chandon Brut Impérial y Rosé Impérial. Un brindis perfecto entre la sofisticación del champán y la frescura del agua de Saratoga.
El chef sorprendió a los asistentes con su cocina japonesa de lujo. Uno de los platos estrella fue el Gold Standard Roll, un rollo de sushi con cangrejo real, cubierto de salmón, copos de oro y caviar, acompañado de salsa de yuzu. Seguro que actores como Adrien Brody o Jeremy Allen White no habrían dudado en disfrutarlo. Su precio en el restaurante es de 77 dólares la unidad.
Entre otros platos destacados, Matsuhisa ofreció tacos de algas, tacos de caviar, jalapeños de jurel, ensalada de sashimi y bacalao negro al miso. Estos hicieron las delicias de los invitados.
Y, por supuesto, no podemos olvidar la famosa Golden Globes gift bag, un verdadero desfile de lujo. Este año, tal y como comenta la revista Elle, su valor subió a la impresionante cifra de 1 millón de dólares, con un catálogo de regalos tan extravagantes como un facelifting de células madre de 40.000 $ o un crucero de 5 días en yate de lujo por Indonesia, valorado en 60.000 $.
Para quienes prefieren experiencias exclusivas, había desde estancias en villas de lujo en las Islas Turcas y Caicos, hasta un paseo privado por los cielos de Finlandia para ver las auroras boreales. Entre los obsequios, la colección de tequilas raros de Komos y una cata de vinos en Bordeaux también destacaron, con opciones más accesibles como el humidor de cigarro Davidoff.
La noche de los Golden Globes estuvo llena de momentos memorables. Entre brindis y premios, la magia de los Globos de Oro se completó con lujo, estilo y generosidad, creando una velada donde cada detalle, desde el champán hasta la bolsa de regalo, fue un reflejo de la grandeza de Hollywood.